Adam Lanza, el autor de la matanza en la escuela Sandy Hook de Connecticut, de 20 años, creció en Newtown, la localidad de la masacre, y allí vivía con su madre. Sus padres se divorciaron en 2008 después de 17 años de matrimonio, y él se quedó en el domicilio materno mientras que su padre, Peter, actualmente vive en Stamford con su nueva esposa. Nancy Lanza, también asesinada por él el día de la tragedia, no era profesora del centro, como se especuló en un primer momento.
Sus compañeros de instituto, del que se graduó en 2010, le recuerdan como inteligente, introvertido y nervioso, según recoge «The New York Times». También hacen referencia a la delgadez del joven que terminó sus estudios sin llamar demasiado la atención, aunque algunos le han definido como «genio y «empollón». Aunque no quiso aparecer en el anuario del Instituto ni tampoco tenía perfil en Facebook. Los que no le conocían a veces se reían de su poca capacidad social, explican algunos compañeros de la época escolar. Incluso se le escuchó hablando de «aliens y de hacer volar cosas».
El hermano del presunto asesino, Ryan Lanza, de 24 años, fue detenido en un primer momento pero ya ha sido puesto en libertad y se cree que no tiene nada que ver con lo sucedido. De hecho, se ha mostrado muy colaborador con la policía y ha relatado que se creía que su hermano sufría un trastorno de la personalidad y era «un tanto autista». Se ha mencionado la posibilidad de que sufriera el síndrome de Asperger. Ryan no vive en el domicilio familiar, sino en el estado de Nueva Jersey.
Una tía de Lanza, Marsha, ha asegurado que Adam fue criado por unos padres cariñosos y que habrían buscado ayuda psicológica para su hijo si hubieran sabido que la necesitaba.
El tiroteo fue escalofriantemente preciso, según un agente de la policía estatal. El rifle era similar a los utilizados por las tropas de Estados Unidos en Irak y Afganistán. Disparó como si fuera un tiro al blanco. Además del rifle de precisión encontraron dos armas más, entre ellas una pistola con la que presuntamente Adam se quitó la vida tras matar a 20 niños, seis adultos y a su propia madre. Las armas las había comprado legalmente, según informa la cadena de televisión CNN.